Condenado a dos años de prisión
Escrito por Oswaldo Álvarez Paz | X: @osalpaz   
Lunes, 18 de Julio de 2011 08:15

altA pesar de estar convencido de que el Derecho no cuenta en las decisiones judiciales que políticamente interesan al gobierno, la noche del pasado miércoles 13 de julio fue terrible. Una mezcla de indignación y tristeza se apoderó de mí como nunca antes.

Lo primero consecuencia de la decisión de condenarme  dos años de prisión por decir la verdad, alertar frene a peligros conocidos e inminentes y exigir del régimen el cumplimiento de sus deberes frente a las estructuras del crimen organizado que operan en Venezuela y la necesidad de cooperar con la justicia española para esos fines. La tristeza fue consecuencia de ver a un pobre muchacho, convertido en Juez 21 de Juicio de Caracas, tratando de darle soporte coherente a la orden recibida. Alberto Rossi Palencia hipotecó para siempre, tanto su conciencia como su carrera, al condenar a un luchador honesto e intachable a dos años de prisión. Él lo sabe. Quizás por eso nunca tuvo el coraje de mirarme de frente. Pero todo tendrá su hora.

La doctora Blanca Rosa Mármol de León, Magistrada del Tribunal Supremo de Justicia, Sala Penal, dio una corajuda entrevista a Edgar López publicada en El Nacional del pasado domingo 17. Me ahorra cualquier consideración adicional. Cito textualmente algunos párrafos: “Con jueces miedosos todos estamos en peligro de prisión y de muerte… Desde el TSJ se imparten instrucciones a los jueces penales sobre cómo deben decidir, y la mayoría no vacila en dictar sentencias complacientes al gobierno para permanecer en sus cargos y evitar represalias como las sufridas por María Lourdes Afiuni… La mayoría de los jueces no tienen fortaleza moral ni ética para administrar justicia, y no vacilan en entregar la libertad de una persona a cambio de su permanencia en el cargo… No hay estado de derecho porque no hay autonomía e independencia de los poderes públicos, que es imprescindible en democracia”. Preguntada sobre el uso del sistema judicial como instrumento de persecución política, afirmó:

“Lo acabamos de ver con la sentencia contra Oswaldo Álvarez Paz. El objetivo es criminalizar la disidencia”

Mi caso es uno más entre los atropellos que sufren los presos políticos, los exilados, los perseguidos y también, porqué no decirlo, los que sufren como consecuencia de la probada ineficacia y las corruptelas del régimen, los delincuentes y presos comunes en los centros de reclusión. Todo ello frente a la escandalosa impunidad de un hampa que dejó de ser “común” hoy politizada y organizada.

Esto no puede ni debe continuar.

Dice el DEUTERONOMIO, 32-35, “… a su tiempo el pie de ellos resbalará, porque el día de su calamidad está cerca; ya se apresura lo que les está pasando”. La noche avanza, el sol asoma en el horizonte. El día está cerca. Nosotros hemos sido levantados en una escuela de principios y valores que orientan nuestras acciones. De acuerdo a ellos recordemos que el perdón no excluye la justicia. ¡

Perdonamos, pero no olvidamos!

Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla  


blog comments powered by Disqus
 
OpinionyNoticias.com no se hace responsable por las aseveraciones que realicen nuestros columnistas en los artículos de opinión.
Estos conceptos son de la exclusiva responsabilidad del autor.


Videos



Banner
opiniónynoticias.com