¿Incitación al odio? |
Escrito por Antonio José Monagas | X: @ajmonagas |
Jueves, 03 de Noviembre de 2011 16:23 |
![]() Un sucinto análisis más allá del tiempo presente, deja ver la repugnante muestra de adulancia en el discurso de encumbrados oficiales en altas esferas gubernamentales quienes se han atrevido a desafiar otro resultado electoral distinto de aquel que pueda resultar de una decisión popular que devenga en la derrota del actual presidente de la República. Indudablemente, esto desbordó el malestar de la población venezolana toda vez que rechaza tan impúdicos anuncios que no reflejan otra cuestión distinta de lo que en política se denomina: régimen dictatorial. Al lado de esta situación, el país político ha vivido recurrentemente el problema de anuncios de aumentos salariales cuyo monto, además de ser producto de una determinación que desconoce necesidades planteadas por el trabajador, reproduce una realidad humillante. Particularmente pues no sólo termina incumpliéndose, sino también luce insatisfactoria en términos de la aguzada inflación que afecta toda posibilidad de mejorar la calidad de vida del venezolano en cualquiera de las ocupaciones y oficios en los que modesta y abnegadamente labora. Es así como maestros, profesores universitarios, profesionales de la salud, policías y demás actores sociales al servicio de la administración pública, en posiciones de mediano y bajo rango, pese a sus protestas y huelgas de hambre, son vapuleados por la verborrea presidencial al momento de prometer condiciones salariales que escasamente rayan en meras dádivas. Igual sucede con los situados, presupuestos universitarios y de corporaciones estatales toda vez que el alto gobierno no respeta la justa y necesaria distribución que debe realizar en función de deberes constitucionales y derechos políticos. Comparar el grosero aumento del sueldo del sector militar, ya incrementado en un 30% (2008) y en 40% (2010) con el menguado salario del sector civil, incita un descontento atroz que termina creando una rotura social, aparte de la polarización política y sus nefastas consecuencias. Es pues que encubriéndose en ridículas argucias como las aludidas por “el arduo trabajo de los militares” (¿cuál), que “no tienen horario” (para qué), porque “no tienen sindicato” o porque ello obedece al “odio de la burguesía”, el presidente sólo está zanjando más aún la diferencias que ahogan este país entre hechos exclusión, corrupción, discriminación y perversión que han caracterizado la gestión política emprendida con la aviesa intención de derrumbar la democracia para sustituirla por una autocracia. Acaso ¿no es esto una traslúcida incitación al odio? ¿O es que sembrar discrepancia o disparidad en un país que supuestamente “es de todos”, no es incitación al odio? |
Cultura en Banda llega con Kemawan, Cayiao y Jorge AndrésUna nueva edición de Cultura En Banda retumbará en la Sala Experimental “Raúl Delgado Estévez” |
APUSB: "Desde el poder atacan permanentemente el conocimiento académico y la experiencia"Omar Pérez Avendaño, presidente de la Asociación de Profesores de la USB y William Anseume, secretario de condiciones laborales de esa organización gremial, |
Movilnet lanza "Plan Juventud Venezuela" con el pack de redes socialesLa empresa de telecomunicaciones, Movilnet, lanzó el "Plan Juventud Venezuela", para clientes nuevos entre 18 y 24 años, |
Movistar activa recarga de un mes de renta a los habitantes de Puerto NutriasComo parte de su compromiso con la sociedad venezolana y en medio de la emergencia que han generado las intensas precipitaciones |
Certificaciones en Redes ISP y Data Centers disponibles en Campus LACNICLacnic informa que la certificación de la especialización en Operación de Redes Data Centers del Campus LACNIC estará activa a partir del 14 de julio. |
El valor de educarLa obra del filósofo Fernando Savater tiene un hermoso título y además sugestivo, |
El negocio del poderUn negocio no siempre implica una gestión comercial o financiera. |
Padres fundadores de la independencia en VenezuelaLa Historia de la Independencia es la historia de un mito. Y los mitos son ficciones |
Okinawa: la última gran batalla del PacíficoEn mi niñez conocí la historia del acorazado más grande del mundo gracias a la serie de Anime: Uchû senkan Yamato/ Yamato acorazado espacial (Leiji Matsumoto, 1974-75). |
El poder sin pudorEn la tradición democrática –especialmente a partir de la constitución de los grandes partidos y organizaciones de masas, como los sindicatos |
Siganos en