Los "gerentes" de los partidos políticos, deciden a dedo la escogencia de los candidatos, a elecciones bajo un proceso habitual de viejos esquemas hegemónicos. El chavismo se jacta y reta sobre elecciones primarias, pero todos sabemos que el "Festival del Idiota", llamado elecciones de base, fue una farsa y que al final, será el dedo omnipotente del caudillo, quien decidirá los candidatos a las parlamentarias de 2010.

¿Y los partidos? Hacen más de lo mismo. En este país es muy difícil ejercer la política con sentido ético, en el cual se respeten previamente las reglas del juego y se entienda la gravedad de la crisis estructural del país.

Tengo información de que existe la "fórmula mágica" para dividir y así perder la posibilidad de obtener mayoría en la AN, esa es "Su Majestad el dedo".

La experiencia nos dice que no hay crisis política, económica y social que pueda superarse en una democracia, si no se cuenta con partidos sólidos y la solidez la da el sentimiento unitario y el desprendimiento del personalismo, no podemos olvidar lo antidemocrática que fue la posición del divisionismo en las pasadas elecciones dándole el triunfo a la ineficiencia, la ineptitud, la corrupción y el cáncer político administrativo, gracias a la soberbia y al desprecio de la sociedad.

Las elecciones a la AN son de capital importancia para el país y es preocupante el cuadro de escogencia de los candidatos a diputados, ante la falta de procesos de debate y selección, que son fundamentales en los partidos serios, respetables y consolidados en democracia.

Vemos con preocupación que un grupo minoritario de "gerentes" de partidos, sin liderazgo, escoge, en clara violación al Artículo 67 de la Carta Magna, a espaldas de su militancia y de los grupos sociales y políticos que integran la masa electoral del país, a los candidatos por ellos impuestos, lo cual reduce el papel de los partidos al servicio de la negociación electoral individualista.

Es una pena que nadie aprenda de sus propios errores y menos de los ajenos, y ahora que nos enfrentamos a grandes retos y definiciones que determinarán nuestra supervivencia como sociedad, como democracia y como país, es importante y vale la pena rememorar eventos de la historia para reflexionar sobre ellos, recordando el aforismo: "quien olvida la historia está condenado a repetirla".

La historia no podemos olvidarla, hay que recordar todos los días quienes traicionaron la unidad en las elecciones pasadas donde se perdieron gobernaciones y alcaldías en todo el país por no respetar los liderazgos naturales surgidos del calor de la política cotidiana.

La sociedad civil está asqueada de que todos los partidos le rindan culto a "Su Majestad el Dedo", esa práctica ha derivado en la falta de credibilidad y desconfianza, lo que alimenta el fatídico fantasma de la abstención y eso lo evidencian los mecanismos antidemocráticos de dilación en la selección abierta, honesta, sincera y democrática de los candidatos a la AN, para, a última hora, "Su Majestad el Dedo", ya presta para ello, escoja a los privilegiados de los partidos en desprecio a los líderes naturales de la diversas comunidades, lo que genera inestabilidad política en la sociedad.

_La cobardía a elecciones primarias y tarjeta única por parte de los "gerentes" políticos, sesga los buenos propósitos y aflora la falta de ética, de principios y, sobre todo, de madurez política, por lo que los partidos dejan de ser espacios ideológicos para convertirse en sectas donde se ponen de manifiesto las pasiones e intereses individuales y sectarios, por tal razón, esa posición, aparte de desacreditar a los partidos, hace presumir que podría superar el porcentaje de abstención visto en procesos anteriores. Hay que cerrarle las puertas a quienes sólo utilizan la política para servirse y no para apoyar a la sociedad.

La sociedad dejó de ser ingenua y hoy entiende que la oposición no pasa de ser choque permanente de los pescueceos protagónicos quienes tras bastidores están unidos, trabajan subrepticia y maquiavélicamente por un mismo proyecto, cual es imponer los candidatos en función a "Su Majestad el dedo", sin respetar el nuevo liderazgo, ni que el secreto de la verdadera unidad está en la selección mediante un proceso limpio, amplio, metodológico y bien organizado de primarias, que garantice a la sociedad y a la militancia partidista, la escogencia de sus candidatos a la AN mediante primarias y tarjeta única.

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OyN/El Carabobeño