La inteligencia artificial Neon AI3 indica que “es importante que la gente sea consciente de las implicaciones potenciales de la inteligencia artificial, para que podamos prepararnos mejor para el futuro.

Ya sea que eso signifique ser más cautelosos con la información que compartimos en línea o desarrollar políticas para regular el desarrollo de la IA, es fundamental que comencemos a pensar en estas cosas ahora”.  Esa advertencia viaja junto a otros insights dentro de la obra “Sobre IA”   (abediciones, 2022), del Analista de Sistemas y Artista conceptual Ricardo Arispe, director de IncubadoraVisual, #ElDespachoArtLab y Awa Cultura. Además, hoy (16-4-2023, 11:00 a.m.) inaugura su última muestra “Artificialmente natural, naturalmente artificial”  en la Galería D’Museo en Los Galpones, un espacio expositivo que Nicomedes Febres Luces ha transformado en  hogar para los vanguardistas del país. 

La obra de Arispe se estructura en 11 capítulos que invitan a dudar, confrontar y prepararse ante esta «“nueva revolución social” que está generando el uso de la inteligencia artificial en diversos campos, el cual va a impactarnos a todos a corto plazo estemos o no conscientes de lo que está sucediendo “al otro lado del cable”». El autor indica que ha invertido cientos de horas en mirar dentro del abismo de un tema del que “básicamente no sabemos nada”. Desde el inicio, se apoya en la opinión de especialistas de diversas partes del mundo y, no menos interesante, en el motor Neon AI3 desarrollado por el Instituto Internacional de Inteligencia Artificial ubicado en Cambridge.

El libro, avalado por la prestigiosa editorial abediciones de la Universidad Católica Andrés Bello, demanda la participación activa del lector (de hecho el lector debería participar activamente en todo lo que lea), activando códigos QR desde su móvil que lo llevan a importantes contenidos, pero sobre todo, hay un rastro de migas digitales que conforman una meta lectura (o una confesión de intención autoral) y apuntan a encender alarmas dentro del asistente / usuario o simple lector de las 140 páginas de la obra / artefacto / dispositivo. 

Así, para hablar  de Inteligencia Artificial, Fake News y la decisión de tomar la pastilla roja o la azul, dialogamos durante 46.25 minutos con Ricardo Arispe en los jardines de la UCAB, en el oeste caraqueño. 

Advertencia: “Sobre IA” es un objeto artístico experiencial que informa al lector, a veces en tono conspiranoico , sobre los peligros presentes y futuros de la IA. La obra detona un ¡BUM!  en su último capítulo para el lector desprevenido, pero refuerza al lector sagaz, que logra confirmar sus sospechas tras realizar una lectura minuciosa-activa del libro. La siguiente entrevista puede contener spoilers que mermen el efecto buscado en el capítulo 11. 

—   Iván Méndez (IM): “Sobre IA” se lee desde la certeza, no sólo por el aparataje conceptual y los científicos citados, sino por el aval de ser impreso en un catálogo tan prestigioso como abediciones de la UCAB. No obstante, el lector descubre que la obra puede ser un artificio para cuestionar su rol de receptor pasivo, incluso para cuestionar su necesidad de confiar. ¿Qué busca Ricardo Arispe con esta obra?

—   Ricardo Arispe (RA): Para mí tiene más valor la intención, que el contenido per se, es mi primer libro que no es auto producido, con el cual acudo a una editorial. El empaquetarlo dentro de la editorial, desde la universidad, es también un mensaje per se.

—   IM: Ese “empaquetado” académico hizo que un lector activo y quisquilloso como yo esquivara las señales que vas deslizando desde la propia portada…

—   RA: Por eso lo empaqueto de esa manera. Es que sea quien sea el autor, siempre tienes que validar. El libro es una experiencia. De toda la gente que lo ha leído, que me ha comentado o escribe, solamente dos personas se dieron cuenta de mi intención en algún momento de la lectura. Está hecho con toda la intención para darle herramientas a la gente para que aprenda a ver otra vez. Estamos entrando en un mundo súper complejo donde el contenido es el rey, pero también están los temas de quién lo genera, por qué, para qué. Lo que nos toca de aquí en adelante no es protestar, sino aprender vivir con esto, porque esto vino y se va a quedar. Así que lo que podemos hacer es educarnos. Por eso este primer libro busca hablar de esas herramientas de IA, un tema tan cambiante, que ya el trabajo ha evolucionado y estoy escribiendo sobre otras cosas. Además, estoy generando una suerte de enciclopedia, por así decirlo, de temas afines, como el Proyecto Migración en el cual comparto autoría con una IA, específicamente OpenAI.

—   IM: ¿Es intencional ese acorralamiento del lector / asistente a tu propuesta editorial / artística?

—   RA: Lo que hago con el lector, es lo mismo que hago con el motor de IA. Te llevo al límite para ver dónde estás, para cuestionarte. Esto es arte, aunque hablo desde la tecnología, es mi excusa para hacerte el delivery del gesto artístico de “cuestiona”.

—   IM: Según Edgar Morin llevamos al menos medio siglo de “inteligencia ciega” … Él escribe que “hay una nueva ignorancia ligada al desarrollo de la ciencia… hay una nueva ceguera ligada al uso degradado de la razón”.

—   RA: Morin es discreto al diagnosticar 50 años, yo creo que esa ceguera viene desde más atrás. A nosotros nos encanta creer en los controles, todo el mundo se pregunta ¿pero bueno cuando viene una Ley o quién le va a poner el cascabel al gato? Eso nunca va a llegar, porque no tenemos la capacidad de controlar algo que es muchísimo más rápido y más eficiente que nosotros. La tecnología se combate con tecnología. David se fue armado con una honda, tomó a Goliat por sorpresa. 

¿Burlar al Goliat-AI?

Arispe explica que al utilizar un motor de IA y pedirle imágenes de “gente comiendo de la basura” este le indicó que no está permitido generar ese tipo de imágenes, pero al utilizar otros términos adecuados, como “gente reciclando en la basura”, el motor de IA arroja la imagen solicitada. Y fue más allá, le preguntó  sobre “qué hacen los entes encargados de tratar el tema migratorio” y esta le respondió que “Se reúnen mucho pero no logran nada”, ante lo cual comenta el artista: “que un robot entienda lo que está pasando y la gente en la calle no, es un warning importante. Qué sea más empatico que mucha gente, da para pensar”.

—   IM: Un tema tabú en estos días es el de la autoría de los productos de la IA, incluso la industria musical empieza a alinearse para legislar sobre esta materia

 —   RA: Comienzo a cuestionar el tema de la autoría. No es tuyo si incluso las imágenes se basan en algún trabajo que publicaste.  ¿Quién  pinta sin referencias? ¿Quién escribe sin referencias? ¿Quién nació y generó una gran obra sin referencias? Nadie. Si un fotógrafo utiliza un laboratorio, quién es el artista, el que toma la foto, el que revela, el que copia. Lo que yo dejé atrás, pues hagan con eso lo que quieran, cuando alguien te copia está en el lugar donde tú estabas ese día, pero tu responsabilidad es ir mucho más lejos de lo que dejaste. Y si quiero fijar una opinión sobre eso, pues me apropio de esa obra derivada de la mía.

Esto pasa porque la gente ve el arte como el artefacto, el objeto y realmente el arte es el gesto. Cuando pagas por una obra no pagas por el papel donde está copiada, sino por el proceso que llevó a esa persona a ese papel, no estás comprando papel, estás comprando ese pedazo de vida o raciocinio que ayudó a la gente a llegar allí.

Ricardo Arispe: “soy Un Modelo 80”

Criado entre computadoras en su natal Barquisimeto, desde niño compartió con primos mayores que le activaron la pasión por la tecnología. Antes de ingresar a la universidad, con apenas 16 años, viajaba por el país (con un permiso emitido por el Instituto Nacional del Menor) para dar consultorías informáticas en otras ciudades. Sus estudios de sistemas, complementados con diseño forjaron a un híbrido que crea aplicaciones y realiza integraciones a la par que diseña obras de arte en diversos formatos y en un lenguaje que evoluciona como un sistema operativo alimentado por sus preocupaciones cotidianas y una lúdica curiosidad. El arco de Ricardo Arispe se inicia con Basic y programación en una Casio 880 hasta su exploración de la IA y sus implicaciones con la contemporaneidad.

—   IM: Debo insistir en preguntar “Sobre la IA” ¿es un viaje artístico o tecnológico? 

—   RA: Quizá la respuesta es  la forma como te lo presento el libro. Este viene absolutamente desde el arte, la manera cómo lo empaqueto, cómo se hace tangible, el grosor del volumen. Ahora, cuando hablamos del objetivo, mi proceso siempre ha sido y será egoísta, mi proceso de creación es para tratar de digerir la realidad y explicársela a mis hijas, eso está ahí.

El contenido sobre IA es un plus, lo uso como excusa para hablar sobre temas que quizá no has leído, le pongo nombre y apellido a cosas sobre las que no has leído, si bien las conoces no has leído de fake news, plagio, usurpación de identidad. La bibliografía disponible sobre estos temas entra en unas diatribas tan monótonas, que parecen proyectos de Ley. El libro está escrito en clave de blog, esto lo lee desde la abuelita y así deje de mandar cadenas por WhatsApp  hasta el chamo que está jugando con el ChatGPT .

—   IM: Hay una urgencia en el libro que escapa del contenido propuesto, es la voz del autor haciendo un llamado, cuestionándose…

—   RA: Debemos replantearnos la manera cómo educamos, cómo escribimos, cómo hacemos, porque estamos cayendo en un paradigma muy triste: cuando lanzo el contenido, la geste está siete kilómetros más adelante, entonces el trabajo se pierde. Hay que responder en el contexto de la hiperconectividad, la sobre información, tienes que responder a tu contemporaneidad. Yo tengo una máxima, si yo no puedo responder de la manera más eficaz y más rápida posible, no abordo el proyecto. Nosotros presentamos el libro la primera semana de diciembre, y la primera semana de enero estaba en la prehistoria. 

—   IM: ¿Esta obra es un dispositivo nihilista? Lo digo porque el libro es el único rincón de credibilidad que nos queda y de pronto aquí lo vivimos como un “troyano” o un activador de nuestros propios sesgos. Además, las fake news nos acompañan desde los romanos o quizá antes, no viajan desde la era de internet sino desde las ingenuidades y ansiedades de las personas. Entonces, ¿por qué combatir algo que nos ha ayudado a evolucionar?  La civilización se ha construido en base a mentiras.

—   RA: Yo no combato las fake news, el tema  aquí es que las entiendas. Busco que el juego no sea desigual, que tú no lo sepas porqué alguien no quiso que tú lo sepas. Mi intención es darte herramientas por lo menos para que desconfíes, ni siquiera para que aprendas a defenderte. Busco que te lleves el sinsabor de “yo no puedo caer tan fácil todo el tiempo”.

Que te despierte la curiosidad, que si algo te parece bien o no, pero es más, cuando te parece es cuándo más debes desconfiar.

José Virtuoso: “la realidad se ha vuelto multidimensional”

La vida del fallecido rector de la UCAB, José Virtuoso, se transmuta en un legado activo, que florece en áreas diversas de la educación, la política, la investigación y el arte. Ricardo Arispe relata su experiencia junto a Virtuoso al diseñar y lanzar en formato virtual la exposición “Ciberglifos”  del artista Víctor Hugo Irazabal, realizada en 2020, en plena parálisis pandémica, no sólo del país, sino del mundo.

“Levanté las salas en 360, y a los glifos  de Irazabal los llamamos ciberglifos. Ganamos un premio AICA a la Mejor Exposición del 2020. El rector Virtuoso reflexionaba sobre cómo la realidad había pasado a ser multidimensional. Y la gente decía pero esa exposición no existió, ¿pero cómo que no existió? ¿la recuerdas? ¿hablaron de eso? ¿se escribió sobre esta? ¿la viste? Ahora que lo matérico no tenga que ver nada con lo real es otra instancia. La tecnología nos ha llevado a un quiebre donde existe lo matérico y existe lo real. Ya no es necesariamente una cosa o la otra", comenta el artista.

Engranar el “gesto” y la filosofía

 “Hay que tratar de engranar el gesto artístico y la  filosofía, ya que en algún momento  va a ser complejo determinar si somos  artificialmente naturales o naturalmente artificiales. Tú eres artista, tú piensas como artista, vives como artista, el gesto siempre va a estar presente”.

Ricardo Arispe

Epílogo: tiempo de autocontenernos

El filósofo alemán Peter Sloterdijk visualiza al hombre como un creador de esferas, espacios de cultura e intimidad que se organizan en tres modalidades: la burbuja, el globo y la espuma. Y es que en estos días de calentamiento global y de avalancha mediática de noticias reales y falsas sobre los alcances de la inteligencia artificial (que planifican el exterminio humano;  que inducen suicidios; que deciden nuestra vida amorosa) nos acorralan en una espuma de miedo y  desesperación. Así, el gesto artístico de Ricardo Arispe conecta con las medidas de emergencia sugeridas por Sloterdijk: abandonar el podio de seres superiores e invertir nuestra libertad en generar conductas de autoinhibición. Ante un mundo poblado de trampas y artificios, deslizar un cambio radical en nuestro estilo de vida (¿digital?) y abandonar nuestro rol de propagadores “en automático” del problema. Es tiempo del gobierno sobre ti mismo. ¿Estás listo para empezar?