Desilusión en Irán
Escrito por Editorial (El Tiempo / Colombia)   
Miércoles, 17 de Junio de 2009 08:04

El ambiente preelectoral iraní permitía pensar en un revolcón propinado por las urnas al régimen populista, ultraconservador, fundamentalista y antioccidental de Mahmud Ahmadinejad. Por una parte, pululaban las multitudes callejeras que coreaban el nombre de su rival en las elecciones presidenciales, Mir Hosein Musavi,

un antiguo guerrillero cuya postura extrema se ha moderado en los últimos años. Por otra, surgían ocasiones democráticas inesperadas, como un debate televisado al estilo estadounidense entre los dos contendores, y duros ataques contra el primer mandatario proferidos por otros líderes políticos, como el ex presidente Ali Akbar Hashemi Rafsanyani (1989-1997). Algunas encuestas, además, empezaban a hablar de la posibilidad de una sorpresa nacida del descontento popular, y los observadores llegaron a bautizar lo que ocurría en Irán como "la marea verde".

 


Marea, por las dimensiones que adquiría el fenómeno; verde, por las esperanzas que sembraba acerca de un severo traspiés del peligroso Ahmadinejad en la presidencia.

Pero los resultados de las elecciones del viernes pasado fueron una sorpresa para todos y una desilusión para los opositores del gobierno. Contra el sentido de las tendencias, que aventuraban una elección bastante pareja, las autoridades electorales otorgaron la victoria por abrumadora mayoría, y en tiempo récord, a Ahmadinejad. Con una abstención de apenas 15 por ciento, los iraníes reeligieron al presidente por cuatro años más con 62,6 por ciento de los votos y relegaron a Musavi a un modesto y sorpresivo 34 por ciento. La oposición gritó fraude (desde antes de las elecciones, Musavi había advertido sobre el particular en una carta al Guía Supremo de la República Islámica, el ayatolá Alí Jamenei) y el Gobierno se precipitó a celebrar el triunfo a su manera. Es decir, estableciendo censura, denunciando una supuesta conjura internacional y ordenando la detención de más de cien miembros de grupos adversarios.

La reacción de cientos de miles de iraníes ha sido contundente: a pesar de las prohibiciones, han salido a la calle en manifestaciones silenciosas para denunciar el resultado. La marea verde es ahora un tsunami en movimiento que recuerda cómo un fenómeno de masas parecido derrocó en enero de 1979 al sha Mohammad Reza Pahlevi. Musavi se ha unido a las protestas y algunos informes señalan que los milicianos islámicos defensores del régimen respondieron dando muerte a siete personas. Ha sido tan impresionante la expresión popular de descontento, que el ayatolá Jamenei se vio obligado a pedir al Consejo de los Guardianes -máxima instancia teojurídica- una investigación sobre los comicios, cuyos resultados se conocerán la semana próxima. Mientras tanto, el reelecto presidente intenta aparentar que todo marcha normalmente y asiste en Rusia a la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái. Su foto con el presidente ruso, Dimitri Médvedev, contrasta con las imágenes callejeras de Teherán inundadas de ciudadanos que lo llaman dictador en carteles y afiches.

La casi desvanecida esperanza de un cambio en Irán obliga a Barack Obama a un juego muy cauteloso. En su ya célebre discurso de Egipto había planteado hace pocos días una nueva era en las relaciones con los países del Oriente Medio. El amplio triunfo de Ahmadinejad es un revés, pero Washington mantiene la mano tendida, aunque Obama ha dicho que Teherán debe respetar la opinión de su pueblo. El problema es que, al otro lado de la mesa, el régimen iraní seguirá aumentando su potencialidad nuclear, incluso con Musavi, y si se confirma el triunfo del actual mandatario, fortaleciendo el islamismo extremo. Mientras tanto, no lejos de allí, en las elecciones del Líbano y las regionales de Marruecos, ganaron agrupaciones moderadas, que el inquilino de la Casa Blanca debe anotar en el terreno de las buenas noticias.

Fuente: El Tiempo


blog comments powered by Disqus
 
OpinionyNoticias.com no se hace responsable por las aseveraciones que realicen nuestros columnistas en los artículos de opinión.
Estos conceptos son de la exclusiva responsabilidad del autor.


Videos



Banner
opiniónynoticias.com