Vecinos de espaldas |
Escrito por Ing. Rafael Diaz Casanova |
Viernes, 24 de Octubre de 2014 07:16 |
Apreciados amigos:
Como todos los miércoles, les copio el artículo que termino de redactar, revisar y corregir.
Espero les parezca adecuado y oportuno paras publicarlo el viernes.
Reciban mi agradecimiento y un gran abrazo,
Rafael
Vecinos de espaldas
Rafael Díaz Casanova
Venezuela y Colombia, Colombia y Venezuela tienen muchísimos kilómetros de frontera común, leemos en Wikipedia que alcanzan los 2.219 kilómetros, que están definidos por 603 hitos y la historia nos muestra que no han sido fáciles sus determinaciones y aceptaciones.
Durante toda la historia republicana de ambos países que comenzó con la separación del Reino de España se han sucedido diferentes actuaciones. Ya el Libertador y sus pares intentaron la breve duración de la Gran Colombia. De entonces a esta parte, dependiendo de los amores y humores de quienes nos han gobernado, es muy larga la historia de amores y desamores. Viejas y nuevas amistades, grandes pleitos.
Hace apenas cinco lustros, tuvimos el más desarrollado comercio internacional. Recordamos que se llegó a un nivel de intercambio que se ubicó por encima de los seis mil millones de dólares norteamericanos. Más adelante esas relaciones se deterioraron y recientemente, con un comercio restringido la deuda de Venezuela con Colombia ha sido una traba importante en las relaciones comerciales.
En aquella época, en 1991, asistimos a una conferencia inolvidable, el doctor Ramón J. Velázquez nos explicó las distintas visiones que tienen los ciudadanos de las fronteras y los de las capitales de sus naciones. En aquel caso nos habló de los pobladores de San Antonio y de Cúcuta quienes tenían visiones absolutamente concurrentes pues sus vidas se desarrollaban a ambos lados de la frontera y tenían familias, trabajos e intereses de uno y otro lado. En cambio, los capitalinos de Caracas y de Bogotá tenían y tienen o tenemos, una visión absolutamente equivocada, en la que la frontera es una muralla y las poblaciones y sucesos sociales, políticos y económicos, son diferentes.
Todo este preámbulo lo hacemos para referir la frustrada reunión entre los cancilleres Holguín de Colombia y Ramírez de Venezuela.
La agenda inicial se redactó alrededor del importante fenómeno del contrabando que se sucede desde Venezuela hacia Colombia y entendemos nosotros que ese suceso tiene dos vertientes, la causa que viene dada por la grosera diferencia que genera el control de cambio en la moneda venezolana. Productos que se subsidian en Venezuela toman camino a Colombia pues el precio del otro lado de la frontera es altamente remunerador. La otra vertiente viene dada por la actividad natural entre moradores de uno y otro lado de cualquier frontera. Una actividad casi natural es la que se provoca por los pequeños diferenciales de precios que puede haber por efecto de algún impuesto o la simple realidad de que existe libertad de comercio.
La corrupción que se ha generado en Venezuela por efecto del diferencial cambiario ha provocado que esas distorsiones económicas que siempre están presentes, en el caso colombo-venezolano produzcan la intervención de personas y organizaciones mayores que realizan el contrabando en cantidades enormes y con provechos groseros para sus bolsillos.
La ya fijada reunión entre los cancilleres se abortó por dos sucesos: El primero se basó en la cacareada agresión y acusación que emitieron personeros del régimen que nos destruye contra el ex presidente Uribe y otras fuentes colombianas por delitos sucedidos en Caracas y el segundo por una incursión de una patrulla del ejército venezolano en territorio colombiano. Esos dos sucesos y una reclamación escrita de la cancillería colombiana produjeron la suspensión y aplazamiento de la reunión.
Venezuela y Colombia, por multitud de razones, tienen la necesidad y el destino de complementarse tal y como lo pensaron hombres valiosos de nuestras historias. No podemos seguir viviendo de espaldas y peleando por cualquier nimio motivo. Mejor dicho, tenemos que entendernos con las armas de los civiles, la inteligencia y la palabra. Solo así progresaremos.
Caracas, octubre 22 de 2014.
Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla
@rafael862 Venezuela y Colombia, Colombia y Venezuela tienen muchísimos kilómetros de frontera común, leemos en Wikipedia que alcanzan los 2.219 kilómetros, que están definidos por 603 hitos y la historia nos muestra que no han sido fáciles sus determinaciones y aceptaciones. Durante toda la historia republicana de ambos países que comenzó con la separación del Reino de España se han sucedido diferentes actuaciones. Ya el Libertador y sus pares intentaron la breve duración de la Gran Colombia. De entonces a esta parte, dependiendo de los amores y humores de quienes nos han gobernado, es muy larga la historia de amores y desamores. Viejas y nuevas amistades, grandes pleitos. Hace apenas cinco lustros, tuvimos el más desarrollado comercio internacional. Recordamos que se llegó a un nivel de intercambio que se ubicó por encima de los seis mil millones de dólares norteamericanos. Más adelante esas relaciones se deterioraron y recientemente, con un comercio restringido la deuda de Venezuela con Colombia ha sido una traba importante en las relaciones comerciales. En aquella época, en 1991, asistimos a una conferencia inolvidable, el doctor Ramón J. Velázquez nos explicó las distintas visiones que tienen los ciudadanos de las fronteras y los de las capitales de sus naciones. En aquel caso nos habló de los pobladores de San Antonio y de Cúcuta quienes tenían visiones absolutamente concurrentes pues sus vidas se desarrollaban a ambos lados de la frontera y tenían familias, trabajos e intereses de uno y otro lado. En cambio, los capitalinos de Caracas y de Bogotá tenían y tienen o tenemos, una visión absolutamente equivocada, en la que la frontera es una muralla y las poblaciones y sucesos sociales, políticos y económicos, son diferentes. Todo este preámbulo lo hacemos para referir la frustrada reunión entre los cancilleres Holguín de Colombia y Ramírez de Venezuela. La agenda inicial se redactó alrededor del importante fenómeno del contrabando que se sucede desde Venezuela hacia Colombia y entendemos nosotros que ese suceso tiene dos vertientes, la causa que viene dada por la grosera diferencia que genera el control de cambio en la moneda venezolana. Productos que se subsidian en Venezuela toman camino a Colombia pues el precio del otro lado de la frontera es altamente remunerador. La otra vertiente viene dada por la actividad natural entre moradores de uno y otro lado de cualquier frontera. Una actividad casi natural es la que se provoca por los pequeños diferenciales de precios que puede haber por efecto de algún impuesto o la simple realidad de que existe libertad de comercio. La corrupción que se ha generado en Venezuela por efecto del diferencial cambiario ha provocado que esas distorsiones económicas que siempre están presentes, en el caso colombo-venezolano produzcan la intervención de personas y organizaciones mayores que realizan el contrabando en cantidades enormes y con provechos groseros para sus bolsillos. La ya fijada reunión entre los cancilleres se abortó por dos sucesos: El primero se basó en la cacareada agresión y acusación que emitieron personeros del régimen que nos destruye contra el ex presidente Uribe y otras fuentes colombianas por delitos sucedidos en Caracas y el segundo por una incursión de una patrulla del ejército venezolano en territorio colombiano. Esos dos sucesos y una reclamación escrita de la cancillería colombiana produjeron la suspensión y aplazamiento de la reunión. Venezuela y Colombia, por multitud de razones, tienen la necesidad y el destino de complementarse tal y como lo pensaron hombres valiosos de nuestras historias. No podemos seguir viviendo de espaldas y peleando por cualquier nimio motivo. Mejor dicho, tenemos que entendernos con las armas de los civiles, la inteligencia y la palabra. Solo así progresaremos. Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla @rafael862 |
El agua es un factor crucial para el crecimiento muscularEl agua es un elemento fundamental para el crecimiento muscular. Una correcta hidratación asegura un transporte eficiente de nutrientes, |
“Las moscas”, una fábula sobre la depresión adolescenteLos días 12, 13 y 14 de abril, en la sala La Viga del Centro Cultural Chacao, Fereteatro presentará |
Inhabilitado el poder del voto en VenezuelaTitulamos estas líneas con un post en X del historiador Ángel Lombardi Guzmán (@LOMBARDIBOSCAN): “El Poder del Voto hoy en Venezuela luce "inhabilitado" “. |
Un capítulo extraordinario en la historia de Venezuela: Santuario de BetaniaEn el corazón de Venezuela, entre las localidades de Cúa y San Casimiro en el estado Miranda, se encuentra el Santuario de Betania, |
Laser Airlines inicia vuelos en la ruta Caracas-MadridEn el marco de su 30° aniversario, Laser Airlines anuncia su expansión hacia Europa con el inicio de vuelos en la ruta Caracas-Madrid el 3 de junio, |
La filosofía: La base de todoEn pocas épocas de la historia la filosofía había sido tan importante y determinante como en la actualidad. |
De la presidenciable Corina YorisLa conocimos telefónicamente, algunos años atrás, cuando tratamos de la posibilidad de un proyecto de ley de creación de la Academia Nacional de Filosofía, |
No a la rendiciónPara los muchos que tenemos la esperanza de un país distinto, que renazca de los escombros, y se encamine hacia un futuro digno; |
Semana Santa en incertidumbreEl tiempo transcurre aceleradamente. Como el agua de los ríos, pasa y no se devuelve. |
Cristo en el cineAl referirse a la Pasión de Cristo, (2004), la película de Mel Gibson, un crítico americano acertó cuando dijo que se trataba de “la más grande historia jamás contada por...el Marqués de Sade”, |
Siganos en