El dólar paralelo y la economía en el 2017
Escrito por Alexis Aponte | X: @alexisaponte14   
Martes, 06 de Diciembre de 2016 00:00

altEn Venezuela podemos morirnos de un infarto, pero nunca de aburrimiento. En menos de 15 días estamos viendo los resultados de una política económica errada 

al máximo, con un comportamiento exponencial en el precio del dólar paralelo, dólar que quiera o no el gobierno, representa un marcador que fija los costos de reposición de bienes y servicios, más aún cuando el gobierno no oferta divisas en el mercado. Varias son las causas de dicho incremento y dada la cantidad de preguntas que se realizan alrededor del mismo, haremos una síntesis de esas razones. Para colmo, esta semana concluyó con una mayor escasez de Circulante (billetes, porque las monedas y billetes de baja nominación nadie las recibe), una mayor Liquidez Monetaria, los puntos de venta colapsados ya que la gente se vuelca a comprar lo que consiga con unos billetes devaluados y por último, los bancos abarrotados de clientes que tratan de buscar algo de efectivo dentro de un “corralito financiero”.

¿Qué sucede con el tipo de cambio?, simplemente, en un país con control de cambio ya por más de una década, que además es mono productor y mono exportador, con una reducción de precios alrededor de un 60% en su principal producto de exportación(petróleo), con una disminución en la producción de petróleo, (220 mil/b/diarios), con una inflación de tres dígitos anuales (alrededor de 440% anual) (1,5% diario), un gasto público desbocado por razones políticas y electorales en puerta cuyos efectos en la liquidez monetaria es de un incremento en los últimos 50 días de Bs  1,6 billones, en términos relativos un aumento de la liquidez monetaria de un 201%, alcanzando para Noviembre un monto de Bs 8.3 billones,  lo cual se traduce  en más bolívares devaluados todos los días en busca de bienes y medicinas que no se consiguen.

A lo anterior tenemos que añadir, los pagos del servicio de la deuda para el próximo año, (US$ 9.800 por lo menos), cuyo monto se observa seriamente comprometido y lo más importante, no hay dólares en caja, que permitan alimentar un precio fijado Dicom. Todo ello, sumado a unas expectativas optimistas  creadas por la Mesa de Diálogo que giraban en torno a una solución política y medidas económicas que atenuaran la crisis política, económica y social, y que hoy día parece naufragar creando pesimismo y frustración en la gente.

La inercia en materia de decisiones económicas financieras con el agravante que si toman decisiones  peor aún y la incertidumbre política donde el gobierno es malo y la oposición pareciera  no querer ser gobierno, entonces, el mercado reacciona ante todo este disparate económico, político y social. Aumenta la inflación, se deteriora el salario real, se deprecia el bolívar, aumenta la escasez, se incrementa la violencia social. Investigadores sociales califican las consecuencias en el ciudadano de “vergüenza e indignación”, lo cual preocupara por sus reacciones ante este panorama.

A la pregunta del por qué aumenta el paralelo, sobran respuestas descritas en  párrafos anteriores, pero además en algo que probablemente el gobierno desconoce; la Ley de Gresham; una de las principales leyes que rigen la economía y en especial  el mercado monetario, y que se puede explicar en el hecho del desplazamiento de una moneda “mala” por una moneda “buena o fuerte”, Thomas Gresham (1519-1579),   logró descubrir que en un mercado en el cual coincide varias monedas, las personas tienden abandonar aquellas que  se deprecian y se refugian en las más fuertes. 

En el artículo anterior se dijo que el país exige con carácter de urgencia decisiones gubernamentales dirigidas a: reducir  y hacer eficiente el gasto público, diseñar y aplicar una política anti inflacionaria para recuperar el valor adquisitivo del bolívar, tender a un cambio único, que cada día se hace más difícil con esta brecha cambiaria, eliminar esas funciones del BCV de prestamista a PDVSA, lo cual estimula el gasto y la inflación. Hoy dado el repunte del “paralelo” agudiza aún más la crisis, los augurios son: mayor inflación y mayor inestabilidad económica, se profundizará el deterioro del salario real.

Es urgente un cambio del modelo económico, pero si el gobierno no tiene el ánimo ni la fuerza de cambiarlo, entonces hay que cambiar de gobierno. Es urgente crear un verdadero mercado de divisas, pero no hay divisas que soporten la demanda. Se podría pensar en un renacimiento del “mercado de la permuta” que se alimente  con papeles de la República y de PDVSA, a sabiendas que su cotización internacional es baja y además incrementaría la deuda soberana. En realidad el gobierno está entrampado y nos conduce a un precipicio. Si este gobierno quiere seguir siendo gobierno, tiene que soltarse el cinturón ideológico y recurrir a los multilaterales solicitando soporte financiero que unido a un diseño de un plan económico de recuperación permita estabilizar en algo la economía.

De lo contrario, los riesgos para todos son incalculables e impredecibles, incluso para el gobierno.

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